En cada país de
América Latina la masturbación tiene diferentes nombres: Hacerse un Antonio, la
paja, Manuela, Limpiar la tubería, llamando a lo cinco magníficos, cambiar el
agua a las aceitunas, cusquiarse, maqueársela, Alemanita, cinco contra uno,
pasar a manual, ¡yo eso no lo hago!, saludar al amiguito, cargar la pistola,
frotar el palito, poner el freno de mano, llenar el pozo, cascársela, sacudir
la sardina, hacer fuego, limpiar el sable, mano helada, darle al manubrio,
jugar al uno, hacer bailar al soldadito, ¡¡Hijo sal del baño!!!
Ok, después de hacerte
reír por un instante, espero que pongas toda tu atención a lo siguiente:
Todos nos ponemos incómodos
cuando hablamos del tema de la masturbación. Algunas veces cuando hablo acerca
de este tema la reacción del auditorio es la clase de reacción que esperarías
si confesaras que le pegas a tu mascota en tu tiempo libre. Así que empecemos por ser honestos, la mayoría de nosotros nos
hemos masturbado.
La masturbación no es
un regalo de Dios para los solteros y tampoco una forma de prevenir otros
pecados sexuales. La masturbación trae un alivio físico, pero nunca puede
satisfacer emocionalmente, no es una experiencia compartida. Está dirigida
hacia uno mismo. La experiencia sexual que fue diseñada para ser compartida con
otra persona, es consumada en la soledad en silencio. La masturbación es un comportamiento
auto-céntrico. No nos lleva a
relacionarnos sino a alejarnos. En vez de resolver nuestro aislamiento, la
masturbación contribuye al problema. En la masturbación estamos tratando de
satisfacer nuestro deseo sexual, pero en una forma inmadura. Recibo mucho
correo de personas atrapadas en el círculo vicioso de la adicción a la
masturbación. Lo hacen porque se sienten tensionados, estresados, enojados,
solos, con falta de ocupación, etc. Quieren detenerse pero no pueden. Algunos
logran pasar semanas e incluso meses sintiéndose libres, hasta que algo ocurre
que los lleva a empezar nuevamente.
La lucha con la
masturbación y la pornografía frecuentemente crecen en el secreto y son
alimentadas por la vergüenza. La tendencia normal de la gente es el tratar de
conquistar sus adicciones en secreto para que nunca nadie sepa que tuvieron un
problema, salvando así la vergüenza de que alguien se entere. La frustración
crece mientras la estrategia es frecuentemente el rogar a Dios que se lleve
estos deseos y cuando El no lo hace, el espiral continua.
En orden de romper
cualquier adicción, la pregunta que eventualmente necesitamos hacernos es: “¿Deseo
la victoria más de lo deseo evitar ser avergonzado?” Si evitar que te descubran
es lo más importante en tu vida, entonces la victoria será muy difícil de
obtener. No estoy seguro que sea justo pedirle a Dios que nos quite los deseos
sexuales porque Él es el que nos los ha dado. Deseos sexuales en las
situaciones correctas son buenas, pero esos deseos sexuales fuera del los
espacios correctos pueden destrozar todo en tu vida, incluyendo tu familia.
¿Qué tan serio eres en
tu deseo de acabar con todas esas actividades destructivas? Cuando lo desees lo
suficiente empezarás a dar los pasos necesarios para vencer. Le contarás a ese
amigo, hablaras con tu pastor, buscaras a un consejero, pondrás los bloqueos
necesarios. Estos bloqueos son necesarios para alejarte de lo que no deseas
hacer. Si quieres abandonar la masturbación entonces pondrás barreras
específicas en tu vida que te ayuden a tener éxito.
Un bloqueo muy
importante es el instalar un filtro en tu computador, un filtro que
reporte frecuentemente a alguien a quien
respetes todas las actividades y sitios visitados en el Internet en tu
computador.
Trata de identificar que
es lo que te lleva a masturbarte; para muchos la principal causa es el estrés.
Entre más estrés mas tienden a regresar a sus adicciones y así escapar de su
realidad. Encuentra una fuente saludable para acabar con tu estrés, quizás el
salir a caminar, el montar en bicicleta, el salir a jugar con tus amigos un
buen partido de futbol o baloncesto, salir a hablar con otra persona. Las
diferentes actividades pueden ayudarte a calmar el estrés.
Si estas batallando con el sexo solitario y quieres hablar con alguien escríbenos un correo a integridadonline@gmail.com
Estamos en esto juntos, no estás solo, aun cuando sientas que lo estas.
Si encontraste herramientas que te ayudaron a dejar la masturbación y quieres compartirla con otros puedes dejarnos un comentario aquí.
Diego Bedoya
Integridad Online